RAFAEL TEJERO CASASUS

Tudela (Navarra), 3 de septiembre de 1938, hijo de un oficial de Telégrafos, natural de Pamplona. Su abuelo era originario de Borja (Zaragoza). Ingresó en las academias militares de Zaragoza y posteriormente en Toledo, de donde salió como teniente de Infantería, a finales de los sesenta. Siempre mostró una actitud comprometida con las libertades, motivo por lo que fue arrestado y trasladado de destino. Pasó un mes en el castillo de Santa Ana (Cádiz) por su amistad con el psiquiatra progresista Castilla del Pino y la del magistrado Juan José del Aguila, quien junto al viejo socialista José Luis Romero estuvieron como soldados a sus ordenes en Córdoba. Cuando se fundó la UMD, al calor de la Revolución de los Claveles portuguesa, se unió a ella de inmediato, en el último trimestre de 1974, y puso su corazón en todas las actividades de la organización. Junto a Juan Prado Fernández, GarcÍa Minal, Sanuel Pellicer, Echeparen y alguno más formaron uno de los primeros grupos de la UMD en Madrid, a partir de un curso de Psicología impartido por Luis Pinilla. Fue uno de los más activos miembros de la entonces clandestina UMD, la Unión de Militares Demócratas. Destinado en la División Acorazada se presentó voluntario para la llamada Marcha Verde en el Sáhara de 1975. Allí realizó gran actividad a favor de la UMD y la prensa internacional pensaba que la guarnición del Sáhara estaba llena de miembros de la UMD. Tras la muerte de Franco y una ligera miniapertura fue uno de los 3 capitanes que ayudaron a dinamizar la UMD en Madrid, impulsada por Julián Delgado. Con ellos la organización creció y se nutrió de nuevos miembros. Tejero tenía un hermano líder del PCE que posteriormente fue concejal por el PSOE. Tomó contacto con la entonces oposición. Disuelta la UMD en 1977, tras la convocatoria de las elecciones, siguió con gran activismo. Llegaron a contar con unos 150-200 partidarios. No faltaba a ninguna reunión. En noviembre de 1978 tuvo serios problemas perseguido por militares ultras. Fue arrestado al presentarse en el Congreso durante la aprobación de las Reales Ordenanzas de 1979. Denunció conspiraciones golpistas, por su cuenta o dentro del “Grupo Saconia”, de policías y militares que evitaron golpes de Estado en marcha en la División Acorazada y la Brigada Paracaidista en 1980. Fue uno de los fundadores de la Asociación “Foro Milicia y Democracia”, que se convirtió en el alma que impulsó las movilizaciones para que el Congreso aprobara una resolución aprobando y agradeciendo la actuación de la UMD durante la transición. Alcanzó el grado de teniente coronel de Infantería. Tres meses antes de su muerte vio recompensada su acción ya que el Congreso de Diputados aprobó una resolución en la que se instaba al Gobierno a rendir homenaje a la UMD, organización antifranquista cuyos miembros fueron detenidos, juzgados, encarcelados y otros perseguidos y postergados. Falleció en Madrid el 10 de septiembre de 2009.